(Sello Editorial Universidad del Tolima, 2020) Pardo Viña, Carlos Orlando
Desde la primera mitad del siglo XX, Ibagué ha sido conocida popularmente como la Ciudad Musical de Colombia. Sin embargo, en
el año 2012, la Unesco declaró a Bogotá como Ciudad Musical de
la Humanidad, un rótulo del que también hacen parte Sevilla (España),
Glasgow (Escocia), Bologna (Italia), Gent (Bélgica) y Brazzaville (República
del Congo). La noticia removió las más profundas fibras de los ibaguereños
quienes, a través de las redes sociales y los medios de comunicación,
expresaron su descontento por la supuesta pérdida del distintivo. El hecho
ponía en duda su identidad. La pregunta que quedaba en el aire es si, en
realidad, ¿alguna vez fuimos Ciudad Musical?, ¿cómo se construyeron esos
procesos identitarios alrededor de la música?, ¿en qué contextos históricos se
desarrolló esa apuesta territorial?, ¿en qué escenarios sociales e históricos
circuló dicha idea?, ¿es la música un cohesor social y elemento clave para el
desarrollo cultural y humano en Ibagué?